sábado, 23 de febrero de 2008

Adiós, Tristeza

Adiós tristeza.
La melancolía ha sido un transporte en el que he viajado.

A partir de aquí usaré mi propio coche, para tener mis propios accidentes.
Procuraré aparcar un poco lejos para, sin prisas, conformar el paisaje.
Quizás seas tú alguien a quien encuentre.
Yo soy esa mujer del bolso grande: vacío de recuerdos, lleno de ilusiones.
Soy una libreta nueva, llena de hojas blancas (quizás un poco amarillentas: son recicladas).
Nos queda aún por escribir la historia: tenemos la de ayer; falta la de mañana.

Me niego a buscar nada; lo auténtico sólo aparece.
Dejo de contemplar las nubes. Dejo también de contemplar los charcos.
Alrededor hay miles de historias.
Yo también soy ellas.
No puede vivir en el cielo, ni en el infierno. Es en la tierra donde tiene que habitar el poeta.
(la mala rosa)

1 comentario:

XuanRata dijo...

Un poema lleno de esa tristeza que nos llena de alegría.
Gracias por tus comentarios en mi blog, y especialmente por aquellos en los que me das un poco de caña. Tengo la impresión de que en este mundillo blogero la mayoría prefieren callarse antes que llevar la contraria, y me temo que con tanto jabón acabaremos todos dentro de olorosas burbujas.